viernes, 28 de marzo de 2008

SOMOS CONGÉNERES

También se constituye en un trato indigno hacia los usuarios, el hecho de que las entidases del sistema de salud, como Direccion Seccional de Antioquia, se refieran en términos impersonales cuando hablan de los pacientes; como por ejemplo cuando afirman que están en espera “14.718 servicios de salud”, o que se negaron “19.942” de éstos; y es un eufemismo porque no son servicios sino: seres humanos. Tratar estos asuntos como meras “operaciones” es poco profesional y humano...

Esa forma de evadir la responsabilidad directa es lo que se conoce como ‘la banalidad del mal’, porque presentan todo como un simple asunto administrativo, desconociendo que desde sus cargos y decisiones, se está infligiendo sufrimiento, pues son decisiones que violentan el derecho a la vida y en un Estado Social de Derecho no se puede someter un derecho fundamental y esencial, a la espera de un trámite formal.

...aunque la verdad lo hacen es porque le ayuda al funcionario a desentenderse del drama humano que vive cada paciente y su familia, que espera la atención médica, así sólo considera dicha autorización como un número más. El hecho de tratarlo como una mera cifra despojándolo de toda consideración humana, es un acto de cosificación del ser humano, además de atacar el derecho a la dignidad. Debido a la impotencia en que sumen al ciudadano, y por desconocer además los derechos de los ciudadanos a participar de las decisiones que le conciernen (como es la salud), es que siento que los funcionarios que administran el sistema de salud vulneran los derechos humanos.

Giovanni Vargas.

miércoles, 12 de marzo de 2008

FILAS SIN FIN

Personas de todos los municipios de Antioquia se dirigen al Hospital La María del Barrio Castilla de Medellín a entregar las órdenes médicas para que les sean autorizadas...o negadas.

lunes, 10 de marzo de 2008

Auditoría Irresponsable

Lo peor que pueden hacer los Auditores clínicos –y es lo que hacen- es no autorizar la orden médica, porque así ésta sea ordenada por un médico general, hay que considerar que él es el Médico Tratante y su autoridad está por encima de cualquier otro ente, sea Comité Técnico Científico o Auditoría; y así esté compuesto por los científicos más importantes del mundo e igualmente persiga fines más humanitarios que se puedan justificar, lo cierto es que no pueden cambiar o negar las órdenes médicas. Porque si tienen dudas de los galenos, esto es un problema laboral (e institucional) que no deben trasladar al paciente negando las prescripciones ordenadas por el Médico Tratante, por respeto a la relación médico-paciente.

El Magistrado Marco Gerardo Monroy Cabra preceptuaba en la Sentencia de tutela T-1063 de 2005 que las auditorías y Comités Técnico-Científicos “(ii) no pueden considerarse como una instancia más entre los usuarios y las EPS.”

Además sería un yerro jurídico, puesto que éstos son sólo entes administrativos (Resolución 2948 de 2003), que pueden hasta tener calidades científicas superiores a las del mismo Médico Tratante, pero éste último tiene algo que los demás no: el conocimiento de hecho, o sea el haber atendido personalmente al paciente. Entonces, para que un Auditor tenga la autoridad científica de reevaluar una orden médica ya ordenada, estaría obligado a ver al paciente, porque sólo así se le respetarían todas las garantías al ciudadano...

...lo otro sería diagnosticar en teoría.

Giovanni Vargas